Scott Van Slyke, hijo del grandeliga estrella Andy Van Slyke, el antesalista Jeff Beasley y el serpentinero Jeff Bennett se uniformaron ayer por primera vez con los colores de la divisa litoralense formando parte de las prácticas de pretemporada del equipo.
“Yo no tengo metas personales aquí. Solo lo que quiero es ganar”, afirmó Van Slyke quien este año en AA de los Dodgers de Los Ángeles pegó 20 cuadrangulares y 45 dobles en 130 encuentros en los que dejó .348 de AVG, 1.022 de OPS y 92 carreras remolcadas.
El jardinero confesó haber sido aconsejado por el ex mánager de los Tiburones, Carlos Subero, quien lo dirigiera esta temporada en el Chatanooga Lookouts de los esquivadores. “Me dijo que hiciera lo mismo que hice allá. Que me esforzara, que tuviera una mente ganadora y que supiera que aún cuando me vaya de 4-0 puedo ayudar a la defensiva para ganar los encuentros. Me dijo además que la fanaticada disfrutará verme jugar si juego con mi máximo esfuerzo”, afirmó quien representa la piedra foránea angular de la ofensiva salada.
El año pasado, los Tiburones tuvieron la segunda producción de carreras más baja de la LVBP promediando 3.74 carreras por encuentro (solo Bravos tuvo un promedio más pobre con 3.33 anotaciones por cotejo).
El norteamericano Jeff Beasly, llave teórica de Van Slyke en la alineación de los litoralenses, no es ningún extraño a la LVBP ni a la fanaticada guairista.
En la temporada 08-09, el derecho tuvo una breve participación con los Tiburones (11 juegos) que culminó por un bolazo en su codo izquierdo que lo sacó del equipo.
“Realmente estoy emocionado. No deseo irme tan temprano en esta oportunidad y tengo fe que lo que hice en las menores este año lo pueda repetir aquí con los Tiburones”, dijo el derecho quien en AAA de los Angelinos esta temporada dejó promedios de .303 de AVG y .838 de OPS con 20 cuadrangulares y 31 dobles en 134 encuentros.
Viejo conocido
En la temporada 2007-2008, Jeff Bennett fue uno de los anclas de la rotación de los escualos lanzando para 3.09 de EFE en 49.2 actos en los que abanicó a 21 rivales y otorgó 16 boletos.
Este año, luego de haber sido dejado en libertad en jugar en una liga independiente por primera vez en su carrera, el derecho de 31 años desea recuperar su antiguo status de grandeliga brillando una vez más con los salados.
“Tengo muchos buenos recuerdos de la última vez que vine. Estaba pensando justamente eso cuando venía del aeropuerto y vi todas las luces en las montañas. Estoy realmente feliz por venir. Sé lo que me espera y estoy listo para ello”, comentó el abridor.
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