El compromiso, la unión y el gran arranque han sido especial
Primero quiero darle gracias a Dios por esta nueva oportunidad de compartir todos ustedes lo que es el día a día en los Tiburones de La Guaira. No es tan fácil como hacer un lineup, pero aquí vamos. También quiero agradecer a la directiva, a la fanaticada y a los jugadores por el apoyo incondicional.
Este ha sido un arranque de temporada muy especial, ya que se gratificó todo el trabajo que comenzó el año pasado y se han dado los resultados de la combinación del pitcheo, ofensiva y defensiva; además, ha sido importante iniciar con el equipo completo con casi todo el material criollo como los importados.
Quiero destacar la incorporación de Lino Connell en la parte ofensiva, porque como coach de bateo ha estado arriba de los jugadores desde el inicio de los entrenamientos y le ha dado una jerarquía a ese cargo que quizás durante años no lo tuvo y los muchachos han sabido captar los consejos que les da durante el juego y las prácticas de bateo.
El compromiso que nos genera darle el título a los Tiburones de La Guaira se ve reflejado en la entrega diaria de los muchachos. Ese aspecto es una de las cosas más resaltantes que hemos visto con una unión total en el clubhouse, en el terreno de juego, donde ellos se están divirtiendo, pero con el firme compromiso para con la fanaticada de clasificar y llevarnos al tan esperado título.
Nosotros en la planificación del inicio de temporada dejamos claro que octubre era la primera meta, porque ha sido un mes difícil en el pasado dentro de la franquicia.
Para poder aspirar a grandes cosas, tenemos que aprovechar la gran cantidad de juegos que tenemos como visitantes este mes (10 encuentros).
Hay que aprovecharlos al máximo porque octubre es un mes complicado para todos los equipos de la liga, pero el buen arranque nos da un respiro y debemos seguir en esa línea.
Quizás el jugar fuera de casa tanto al comienzo nos da la ventaja de ver más acción en casa en los meses de noviembre y diciembre con el apoyo de nuestra fanaticada, que son factores que pueden influir en la parte final del campeonato.
Aunque debo resaltar que para Tiburones de La Guaira es importante ganar en casa y en la carretera. Yo les he dicho a los muchachos que lo fundamental será tener semanas positivas y evitar al máximo tener todo tipo de rachas negativas.
Les quiero agradecer a todos los jugadores del equipo el esfuerzo que están haciendo desde el pasado 19 de septiembre y que sigan jugando duro todos los días, porque los frutos van a venir más adelante.
A la fanaticada también quiero pedirle que sigan apoyando a los jugadores, sabemos todo el esfuerzo que hacen para ir al estadio juego a juego para apoyarnos y que tengan mucha fe en el equipo, porque todos estamos comprometidos y en la misma sintonía de llevar al equipo a la meta que todos queremos: el campeonato.
Finalmente, en esta primera columna quiero agradecerle a María de La Paz, mi esposa; a Marimar, mi hija, y a Marco, mi hijo, por el apoyo incondicional en todo momento durante mi carrera como técnico y como mánager en la Liga Venezolana de Beisbol Profesional.
Nos volvemos a ver la próxima semana, y Tiburones pa’encima.
Este ha sido un arranque de temporada muy especial, ya que se gratificó todo el trabajo que comenzó el año pasado y se han dado los resultados de la combinación del pitcheo, ofensiva y defensiva; además, ha sido importante iniciar con el equipo completo con casi todo el material criollo como los importados.
Quiero destacar la incorporación de Lino Connell en la parte ofensiva, porque como coach de bateo ha estado arriba de los jugadores desde el inicio de los entrenamientos y le ha dado una jerarquía a ese cargo que quizás durante años no lo tuvo y los muchachos han sabido captar los consejos que les da durante el juego y las prácticas de bateo.
El compromiso que nos genera darle el título a los Tiburones de La Guaira se ve reflejado en la entrega diaria de los muchachos. Ese aspecto es una de las cosas más resaltantes que hemos visto con una unión total en el clubhouse, en el terreno de juego, donde ellos se están divirtiendo, pero con el firme compromiso para con la fanaticada de clasificar y llevarnos al tan esperado título.
Nosotros en la planificación del inicio de temporada dejamos claro que octubre era la primera meta, porque ha sido un mes difícil en el pasado dentro de la franquicia.
Para poder aspirar a grandes cosas, tenemos que aprovechar la gran cantidad de juegos que tenemos como visitantes este mes (10 encuentros).
Hay que aprovecharlos al máximo porque octubre es un mes complicado para todos los equipos de la liga, pero el buen arranque nos da un respiro y debemos seguir en esa línea.
Quizás el jugar fuera de casa tanto al comienzo nos da la ventaja de ver más acción en casa en los meses de noviembre y diciembre con el apoyo de nuestra fanaticada, que son factores que pueden influir en la parte final del campeonato.
Aunque debo resaltar que para Tiburones de La Guaira es importante ganar en casa y en la carretera. Yo les he dicho a los muchachos que lo fundamental será tener semanas positivas y evitar al máximo tener todo tipo de rachas negativas.
Les quiero agradecer a todos los jugadores del equipo el esfuerzo que están haciendo desde el pasado 19 de septiembre y que sigan jugando duro todos los días, porque los frutos van a venir más adelante.
A la fanaticada también quiero pedirle que sigan apoyando a los jugadores, sabemos todo el esfuerzo que hacen para ir al estadio juego a juego para apoyarnos y que tengan mucha fe en el equipo, porque todos estamos comprometidos y en la misma sintonía de llevar al equipo a la meta que todos queremos: el campeonato.
Finalmente, en esta primera columna quiero agradecerle a María de La Paz, mi esposa; a Marimar, mi hija, y a Marco, mi hijo, por el apoyo incondicional en todo momento durante mi carrera como técnico y como mánager en la Liga Venezolana de Beisbol Profesional.
Nos volvemos a ver la próxima semana, y Tiburones pa’encima.
Marco Davalillo
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