El campocorto de los Tiburones de La Guaira apenas tiene 21 años, pero sorprende con su madurez, tanto dentro como fuera del terreno de juego.
"Este año tengo un compromiso más grande, pues ya cumplí mi temporada de novato con La Guaira. Siento más confianza, pero tengo que cumplir con las expectativas, porque cuando tú haces un buen trabajo en una campaña, en la siguiente al menos quieres estar igual o mejor", dijo el infielder criollo.
Para Rojas, prospecto de los Rojos de Cincinnati en las Mayores, jugar en el país le permite aprender sobre el juego y a la vez curtirse.
"Esta pasantía me ayuda a estudiar bien a los peloteros que juegan a diario en Venezuela, a los que tienen experiencia en las Grandes Ligas y a importados prospectos de las organizaciones. Uno aprende mucho".
Rojas no es ajeno a los altibajos de la franquicia litoralense durante esta campaña.
"No hemos estado bien. No tuvimos un buen arranque".
El infielder dice que defender la camiseta de La Guaira es algo que lo llena de orgullo, aunque de pequeño se identificó como aficionado de los Leones.
"Imagínate, nunca pensé que iba a llegar a jugar con este club. De niño, venía a los juegos de pelota, mi sueño era jugar algún día en el Universitario, era caraquista, pero ahora estoy con La Guaira".
Los progresos de Rojas en el beisbol de Estados Unidos este año motivaron que Cincinnati lo subiera de Clase A fuerte a Doble A, al final de la zafra.
"Fue positivo. La organización me pidió que me concentre en el juego diario en Venezuela. Los Rojos siempre me han tomado en cuenta, es cierto, hay mucha competencia, pero igual voy a trabajar muy duro. Yo perdí unas cinco o seis semanas por una lesión en la muñeca izquierda. Me operaron, tuve un problema de ligamentos, pero estoy bien ahora".
En la presente zafra, con los Tiburones, Rojas promedia .286 en siete juegos. Algunas molestias en los tobillos han impedido que vea más acción, pero él aguarda paciente su momento.
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