Davalillo revivió a los Tiburones el año pasado, cuando la directiva decidió despedir a Phil Regan y darle el cargo en la segunda quincena de noviembre. En ese momento acumulaban seis laureles y 21 derrotas, prácticamente eliminados sin siquiera cumplir la primera mitad de la ronda regular.
Sin embargo, bajo el mando del hijo de Pompeyo, los salados lograron obtener 20 laureles en 34 partidos, manteniendo esperanzas hasta la última semana de campeonato.
Siempre les hablo claro y fuerte a mis peloteros. Ellos además de profesionales son seres humanos y a veces necesitan palabras que los estimulen. Es importante que los jugadores sientan el apoyo de su manager en los buenos y malos momentos", sostiene Davalillo.
En el clubhouse de La Guaira existen normas que todos los peloteros deben cumplir por igual, sean novatos, grandeligas o jugadores de ligas independientes. El que no las cumple, es amonestado.
Manejo del bullpen y la banca, otra clave del triunfo
Los lanzadores abridores de los Tiburones poseen foja de 9-11 y efectividad de 5.15 en lo que va de campaña, por lo que el manager Davalillo ha tenido que hacer malabares con su cuerpo de relevistas para pescar las victorias que los mantienen en la parte alta de la tabla de posiciones.
"Somos como un tablero de ajedrez. Contamos con peones, alfiles y demás fichas para hacer cualquier tipo de movimiento. Este equipo está lleno de talento y eso es lo importante", señala el estratega, que a juzgar por los resultados ha encontrado la manera idónea de combinar en su lineup el arrojo juvenil de Eduardo Escobar, Héctor Sánchez, Ehire Adrianza,_Miguel Rojas y José "Cafecito" Martínez; con la experiencia y jerarquía de peloteros como Gregor Blanco, Oscar Salazar, César Suárez y el recién lesionado Luis Rodríguez.
"Es clave que todos los peloteros se mantengan enfocados y trabajando fuerte a diario así no estén como titulares"
Comprometido con la afición
Lo dijo el primer día de práctica y lo ha repetido cada vez que ha tenido oportunidad en lo que va de campaña. "Ya son 25 años sin un título para la afición de La Guaira. Es hora de hacer algo al respecto. Aquí todos los jugadores, técnicos y el resto del personal está al tanto de la responsabilidad que tenemos con los fanáticos, la directiva y con nuestros familiares que tanto apoyo nos han brindado", apunta Davalillo, quien cita lo ocurrido el pasado viernes 21 de octubre en la UCV.
Ese día los fanáticos ovacionaron a José "Cafecito" Martínez cuando salió al terreno de juego, un día después de que cometiera una pifia defensiva que convirtió un triunfo en derrota. "Eso habla del compromiso que tienen la afición con nosotros y nosotros con la afición. Esta es la gran familia de los Tiburones", puntualizó el estratega que dedica cada triunfo a su esposa Marypaz y sus hijos Marco y Marymar.
Victor David Melo Zurita.
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